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Archivos de Castilla y León
Archivos de Castilla y León
Fernando Bellver Acevedo (Madrid 11-12-1928 / Palencia 3-12-2006) fue uno de los grandes fotógrafos de Palencia durante la segunda mitad del s. XX. Su importancia se mide, no solo a través del inmenso fondo que creó (más de 30.000 negativos solo como fotoperiodista), sino porque cubrió gran parte de los ámbitos de la profesión: Además que fotógrafo de estudio, de exterior, reportero, camarógrafo, comercial y formador.
Nacido en la capital del reino, se trasladó a Palencia en 1953, donde comenzó su andadura como fotógrafo de calle a comisión para Estudios Madrid. A la vez nació su instinto comercial: abrió un negocio de novelas, que llamó El pasatiempo y más tarde otro de recuerdos, La bella desconocida, que desparecerían años después.
Recién nacida Televisión Española surgió la posibilidad de solicitar la corresponsalía en la provincia, que obtuvo. Esto le terminó de formar pues tuvo que acudir a Madrid todos los fines de semana durante dos años para ser instruido. Fue corresponsal desde 1958 hasta 1982, lo que le permitió acceder a puestos privilegiados en todos los actos importantes que ocurrieran en la capital y provincia, convirtiéndose en testigo ineludible del devenir de los palentinos.
Paralelamente continuó su labor comercial abriendo una tienda de material fotográfico -algo novedoso- a nivel de calle, el germen de lo que posteriormente sería Cine-Foto Fernando, en la C/ Barrio y Mier. El negocio creció, con estudio y laboratorio, se amplió y extendió a otros locales de la misma calle, y de otras de la ciudad como la Av. Modesto Lafuente, para acabar abarcando varias áreas relacionadas con la imagen: copistería, televisión, video. Prueba de su capacidad innovadora fue la instalación del primer laboratorio digital de Palencia en 1999.
Toda esa actividad se apoyó en la contratación y formación de una nueva generación de fotógrafos y colaboradores que continuaron y perpetuaron su legado estableciéndose, varios de ellos, como profesionales con estudio.
Queda para los palentinos una obra inmensa marcada por su buen hacer fotográfico, basado en la rapidez, calidad de la imagen, buen ojo y acierto en los encuadres, buscando siempre la efectividad y narratividad de la imagen. Un fotógrafo para la intrahistoria de Palencia.